La estrella Mayara Russi, Fluvia Lacerda y Nahuane Drummond comparten su visión y experiencia en la industria

Mayara Russi, Fluvia Lacerda y Nahuane Drummond protagonizan el programa de E! que acaba de estrenar su segunda temporada. Por Zoom, nos compartieron sus visiones y experiencias dentro de la industria.

Mayara, Nahuanne y Fluvia se prestaron a una charla sincera y desprejuiciada.

Nuestra vecina Brasil, en lo que a moda respecta, suele ser una nación avant-garde. Semillera de tendencias, y también de súper modelos, siempre fue además muy abierta y open minded en términos de “cómo vestir” (sin tanto mandato) y cómo lucir de la mejor manera posible cada cuerpo.

No es de extrañar que fue uno de los primeros países de la región, allá por inicios del nuevo milenio, donde la llamada “moda XL” comenzó a tener realmente cabida, sin transformarla nunca en anécdota ni excepción.

 

Mayara Russi, hoy de 31 años, comenzó a modelar allá por 2004. Si bien al comienzo solo estaba asociada a la etiqueta “talles grandes”, con el tiempo comenzó a realizar campañas que no se limitaban a ese segmento.

En noviembre de 2017 protagonizó un editorial en Marie Claire Brasil que ganó gran visibilidad y le abrió aún más las puertas al mundo internacional. Ella es una de las tres protagonistas de Belleza XL, el reality de E! que acaba de estrenar su segunda temporada y que ahora se centra más que nunca en el movimiento body positive, una ola que es realmente imparable y que está cambiando las reglas de la moda a toda nivel.

Sus otras dos compañeras y compatriotas son Fluvia Lacerda (a quien apodan “la Gisele Bündchen del plus size”) y la joven Nahuane Drummond. Con las tres hablamos vía Zoom sobre sus vidas y su visión de por qué la inclusión en la moda llegó para quedarse.

-Teniendo en cuenta los mandatos y estereotipos que existen en la industria de la moda, ¿en qué momento se dijeron: “voy a ser modelo”?

-Fluvia: Mi recuerdo más especial es de cuando tenía 16 años y vivía en Nueva York y una agente de moda se me acercó en un autobús preguntándome si quería ser modelo. Yo no entendía nada, pero accedí por curiosidad.

Así fue que hice mi primera editorial de moda, no recuerdo bien el medio, pero sí que estaba rodeada de modelos profesionales y una gran producción. Después seguí haciendo cosas sueltas que me las tomaba de una manera algo distante, como un simple trabajo para pagar las cuentas.

Con el tiempo empecé a viajar cada vez más y a darme cuenta de que realmente podía vivir de eso, de que tranquilamente podía ser una modelo profesional.

-Mayara: Cuando terminé el colegio me anoté e hice un curso de modelaje en San Pablo y al poco tiempo tuve mi primer trabajo para una marca super popular y masiva Brasil. Al comienzo yo también lo viví así, como algo que hacía básicamente por el dinero.

La verdad es que no quería ser una “modelo gorda”, tenía muchos conflictos conmigo misma, era nueva y me avergonzaba mostrar mi trabajo a los demás. Con el tiempo fui madurando y creciendo y después de un cáncer de tiroides, me di cuenta de que tenía que dar un cambio en mi vida, modificar mi actitud y abrazar mi cuerpo y mi salud. Y también mi trabajo como modelo.

-Nahuane: Nunca pensé que esto podía ser una profesión para mí. Empecé para ayudar a mi familia, yo ya tenía otro trabajo y además estudiaba en la universidad. Pero el amor por este oficio fue creciendo.

Finalmente salí de la universidad y me dediqué full time a esto, ya que comencé a tener cada vez más seguido la posibilidad de viajar y trabajar en el exterior.

 

-¿Cuáles fueron los principales desafíos y dificultades que enfrentaron en este camino?

-Fluvia: Para mí el mayor reto fue lograr un equilibrio entre ser madre y modelo. Fue un dilema muy presente en mi vida, durante mucho tiempo. Conciliar las ausencias con mi vida de madre y sobre todo con la culpa que me generaban. No fue sencillo, pero de a poco lo fui logrando. Es algo que debemos hablar entre las mujeres.

-Mayara: Para mí también la maternidad también fu un enorme desafío. Fui mamá muy joven, al igual que modelo muy joven, por lo cual desde el comienzo tuve que arreglármelas para combinar ambos roles.

Recién cuando comencé a amar de verdad el modelaje, a darme cuenta de que lo podía amar y de que no tenía por qué ocultarme ni mucho menos, las cosas comenzaron a fluir de otra manera.

Hoy en día, tengo otro reto en mente, que el talle 52 no sea una limitante para mi carrera ni para nadie. A pesar de los cambios, la industria sigue pensando en términos hegemónicos.

-Nahuane: Yo siento que tuve varios obstáculos pero que finalmente los pude atravesar y cada uno me dejó múltiples enseñanzas. Dejar la universidad no fue una decisión sencilla, lo mismo que mudarme a Londres, ya que no sabía ni una palabra de inglés…

-¿Qué les pasa con la etiqueta Modelo Plus Size? ¿Qué le dirían a una chica que quiere comenzar un camino en ese segmento?

-Mayara: El algo complejo ya que, si queremos romper con los mandatos y cánones en la moda, no deberíamos fijarnos tanto en lo que esa industria pide hoy.

Mi consejo principal sería que se rodee de gente profesional, personas que entiendan realmente sobre este mundillo y sobre lo que una modelo plus size o “curve” puede ofrecer. Es muy importante buscarse también un agente que sea responsable y consciente de estos temas.

Hoy veo por las redes que muchas chicas se largan solas o aceptan trabajos gratis y ese e el mejor camino.

Fluvia: Lo primero que le diría es que no hay que tomar esta carrera como una terapia de autoaceptación. El camino en todo caso debería ser inverso. Ser modelo no aumentará tu auto estima y tu auto aceptación porque sí. Es más, podría hasta complicar ese trabajo, que siempre debe ser propio y personal.

-Nahuane: Le diría que si realmente tiene el sueño de ser modelo, tiene que seguirlo. Y que modelo no se nace, sino que se desarrolla, con trabajo, predisposición y paciencia. Sobre todo eso, con paciencia y mucha confianza genuina, no impostada, en lo que cada una puede ofrecer.

Related Posts

Our Privacy policy

https://growglobal24.com - © 2024 News