La polémica vuelta rápida de Ricciardo en Singapur con el equipo B de Red Bull que le restó un tanto a Norris, hace que el de McLaren todavía no dependa de sí mismo para ser campeón
Daniel Ricciardo conversa con Max Verstappen.
El punto de la discordia obtenido por Daniel Ricciardo en Singapur es más importante de lo que parece. En realidad, no lo sumó el piloto de RB, sino que se lo quitó a Lando Norris ya que al rodar fuera de los 10 primeros no le computa al australiano, pero, lo ques más importante, tampoco al británico de McLaren.
De momento ese escuálido punto hace que, de primeras, Norris ya no dependa de sí mismo matemáticamente todavía para ganar el título. Las cuentas: faltan seis carreras y si Norris las ganara todas y Verstappen fuera segundo, le recortaría 42 puntos. Si además sumara las seis vueltas rápidas, serían 48 de ventaja. Y faltan las tres carreras al sprint, donde el primer puesto en todas del chico papaya, contra el segundo de Max, daría otros tres mas. En total 51 puntos. Y ahora la desventaja es por 52, todo por ese punto de Ricciardo.
No deja de ser un escenario matemático, curioso, pero no imposible. Previsiblemente vaya cambiando. Lo que pone de manifiesto, y en duda, es la ética del movimiento de RB, que podría decidir un título llegado el momento. Ahora faltan seis carreras, claro, pero en la última de Abu Dabi quién sabe hasta dónde se puede estirar el chicle. Sí, RB ya lleva siendo 18 años el segundo equipo de Red Bull, se llamara Toro Rosso o AlphaTauri, y más allá de apartarse del camino rápidamente cuando llega ‘papá’ por detrás en carrera, no suelen complicarse más la vida. Están en otra Liga, hasta que, como en Singapur, marcan algún golito. “No me viene nada mal”, reconoció Verstappen en Marina Bay. “Gracias, amigo”.
Haré unas cuantas preguntas, porque no es la primera vez que lo vemos y no creo que sea la última
No es ilegal, claro. Primero porque es indemostrable que Red Bull pidiera a RB esa vuelta, que los Mekies y compañía han vendido rápidamente como un regalo-homenaje a Ricciardo en su posible despedida de la F1. Nada hay en el reglamento que impida que Red Bull tenga dos equipos, pero la ventaja es evidente: es un comodín para momentos puntuales.
Ricciardo le echó sentido del humor: “Tenía Red Bull en mente, si gana el título por un punto seguro que recibo un gran regalo de Navidad… no en serio, me hicieron una oferta de 3.5 millones por esa vuelta rápida… ” vamos que enlazaba coñas una tras otra. A Zak Brown esto le altera los nervios desde que aterrizó en la F1, lo de los equipos A y B quizás por la cultura americana de las carreras en la que se crió. Y ayer se cabreó.
“Sin duda haré algunas preguntas. Fue un bonito espectáculo de equipo A/B que no pensé que estuviera permitido, pero bueno, no es la primera vez que lo vemos, y probablemente no será la última” avanzó el CEO de la escudería. “Es algo de lo que he hablado en el pasado y creo que ilustra que sí sucede, porque creo que nadie habría hecho esa parada para intentar la vuelta rápida para no ganar nada”. Mientras, las redes se llenan de memes y bromas sobre el último favor de Ricciardo a la causa y hasta recuerdan el pelotazo a Norris en Silverstone cuando eran compañeros.
El jefe del equipo, Andrea Stella, que peina canas en la F1 reconoció que “no lo ví venir, esperemos que esto no se decida por un punto, pero es verdad que deberíamos asegurarnos de que los equipos se comporten de manera totalmente autónoma, porque este es un campeonato de constructores. Esto debe abordarse definitivamente, pero en ningún momento tengo elementos para decir que RB haya intentado hacer la vuelta más rápida para apoyar a Red Bull. Simplemente lo encuentro un poco… cómo decirlo… extraño”.
El propio Norris no ve la magnitud del tema porque rueda con tanta superioridad que piensa en centenas, no en unidades. Pero en 2021, ayer casi, llegaron a la última carrera empatados Verstappen y Hamilton. Empatados. Y en este siglo, en 2005, 2007, 2008, 2010 y 2012, con Alonso en la partida de varios, o en 2016 se decidió el título en la última carrera. Y ahí un punto sí que puede valer una posición más o menos si van mal dadas en esa carrera.
O quizás a Lando le preocupa más los puntos que ya ha perdido en su propia casa con su compañero Piastri por no priorizar en su figura desde la jefatura. Y ese punto, como dijo ayer “no me gusta perderlo, pero si se lo lleva Ricciardo pues fenomenal”. Era su primer Grand Chelem (pole, victoria, liderato todas las vueltas y vuelta rápida), el primero de McLaren desde 1998… ¿y no te molesta, Lando? le cuestionaron al acabar la carrera: “Así ha sido en la Fórmula 1 desde, no sé, probablemente desde antes de que yo naciera, así que… No hay nada de qué quejarse. Juego inteligente por su parte. Feliz por Daniel. Eso es todo”.
EL PRECEDENTE
Un punto le bastó a Emilio Alzamora para ganar el Mundial de 1999 en 125 ante Marco Melandri, 227 a 226, ya que no le valía ni el empate. Un punto que un mes antes, su compañero de equipo, Gelete Nieto, le ‘regaló’ en Phillip Island parándose casi al entrar en meta para que Emilio, que era líder del Mundial y venía de una caída, entrara en meta y sumara al menos algo, con cuatro carreras de antelación.
Lo vio rápido desde el muro Ángel Nieto, que se desgañitaba en el muro con su hijo, como ayer Christian Horner en Singapur. Nunca sabes si puede valer, o en este caso, está claro que puede valer. Andrea Stella, el bos de McLaren reconoció que “no lo vi venir”. En Argenina, un mes después, a Emilio le bastaba con quedar tras Melandri, fuera cual fuese la posición, y aunque el italiano hasta intentó tirarle, ralentizando la carrera para que llegaran más rivales, no pudo evitar el título del español.