Sid Mashburn, experto en sastrería ubicado en Atlanta, comparte sus mejores consejos para estar a la moda cuando la temperatura se eleva por las nubes.

Vestir un traje de verano es una excelente opción durante esta temporada.Fotografía: Sid Mashburn. Collage: Chris Panicker

Un traje de verano en pleno agosto no tiene que ser un suplicio. Y es que los trajes, a pesar de su poderío sartorial, no tienen fama de ser cómodos, sobre todo en los días más calurosos y sofocantes de esta temporada.

Si bien la mayoría de los hombres preferimos para las jornadas veraniegas una polo de punto, unos shorts y un par de sandalias antes que optar por un saco y unos pantalones a la medida, el sastre experto Sid Mashburn, quien reside en Atlanta, no es como el resto de nosotros. Por un lado, forma parte de una larga tradición de caballeros del Sur de Estados Unidos cuyo decoro a la hora de vestir de traje no vacila ni un segundo, por muy abrasador que sea el pronóstico del clima. Por otro, Mashburn es un veterano de la moda masculina con décadas de experiencia en las telas y fits (ajustes) que te harán sentir (y parecer) tan fresco como un julepe de menta recién servido, tanto si vas a la oficina como si bailas al ritmo de Whitney Houston en la pista de baile de una boda. Nos pusimos en contacto con Mashburn para que nos diera sus mejores consejos.

La lana no es solo para los suéteres

A pesar de que se asocia con tus capas de ropa preferidas para el otoño, las mejores telas para un traje de verano son las fabricadas con 100% de lana, señala Mashburn. Naturalmente repelente al olor y resistente a las arrugas, un traje de lana fabricado con hilos de alta torsión (a veces llamados de lana “hopsack”, “fresca” o “tropical”) te mantendrá tan fresco como cualquiera hecho de algodón o lino, con la ventaja añadida de que requiere menos lavados, una consideración importante en los meses de mucho sudor. “Es la tela de alto rendimiento de la naturaleza”, resalta. “Sé que suena como si hablara en nombre de la agencia de la lana o algo así, pero es verdad. Fui a una boda en Redneck Riviera, y los hombres que usaban trajes de algodón y lino eran quienes sudaban a mares. Pero yo no sudé nada gracias a mi tela”.

Un traje de lana de alta torsión te mantendrá tan fresco como uno hecho de lino o algodón.Sid Mashburn

Lo importante en un traje de verano es el tejido

“No se trata tanto del contenido de la tela o del peso como de la construcción y el tamaño del hilo”, explica Mashburn, quien un día laboral de principios de agosto lleva un traje confeccionado con una lana italiana gruesa de cuatro capas con una textura nudosa y un tejido similar a una red. El hecho de que su traje sea transpirable, aclara, es producto de los hilos más gruesos empleados para tejerlo, que dan lugar a una estructura más abierta que la que se logra con los hilos más finos usados en la mayoría de los tejidos de lana. “Tiene que ver tanto con el tamaño del hilo como con la construcción real. Así que, aunque el tejido tenga algo de peso debido al tamaño del hilo, el tejido abierto lo hace transpirable”.

La estructura no tiene por qué ser sinónimo de exceso

La mayoría de los trajes de verano de Mashburn cuentan con medio forro, comenta, pero no hay nada malo en vestir un saco completamente forrado y estructurado si la tela juega a tu favor. “Un traje de lino o lana podría ir totalmente forrado y estructurado porque la tela ya brinda un poco de adaptación al clima”.

Dos palabras: seersucker monocromático

El seersucker, esa icónica tela de algodón a rayas con sus característica arrugas, es una de tus mejores apuestas para mantenerte fresco (resulta que esas arrugas están ahí para generar más circulación del aire), pero un traje completo de seersucker quizá sea demasiado. “Tendemos a pensar en el seersucker bicolor azul y blanco como el que llevaba Andy Griffith en el papel de Matlock”, apunta Mashburn. Para un look más sutil con la misma capacidad de transpiración, recomienda en su lugar un seersucker monocromático. “Es exactamente el mismo tejido y funciona exactamente igual que el seersucker bicolor, pero lo vendemos en azul marino, en caqui, en rosa, en salvia, solo que los colores son diferentes”.

Arrugas, sí, pero no demasiadas

Un traje de lino nunca tendrá la misma caída que uno de lana (¡y no pasa nada!), pero tampoco debería estrenarse arrugado. “Si tengo un traje de lino que me he puesto tres o cuatro veces y se ve arrugado, probablemente no me lo ponga para una boda”, menciona Mashburn. “Arrugado está bien; demasiado arrugado es otra cosa”. En lugar de eso, sugiere que pidas que prensen a mano tu traje de lino con anticipación (el vaporizado llega a dañar la tela, y prensar a máquina suele ser demasiado brusco). “Si no puedes llevarlo a la tintorería, prénsalo tú mismo”, observa. “Hoy en día hay suficiente información en internet sobre cómo prensar algo. No tienes que sacar un sobresaliente en el prensado, pero si sacas un notable, sigue siendo mejor que cuando empezaste”.

Deja los shorts para otro día

“Veo a hombres que usan shorts con saco, pero no es para mí”, agrega Mashburn. “Cada uno tiene una forma distinta de vestirse, así que no los juzgo. Si vas en bermudas, con calcetines altos, o con saco y un par de zapatos náuticos… quizá. Pero personalmente no es para mí”.